Google ha recibido tres demandas antimonopolio en Estados Unidos y acumula ya tres causas legales en esta materia para el pasado mes de octubre de 2020. En esa ocasión, el fiscal general de Colorado, Phil Weiser, encabezó al grupo de 38 estados y territorios del país que acusa al buscador de Alphabet de mantener ilegalmente su hegemonía a través de conductas y contratos que merman la competitividad.
Pero, ¿qué es Alphabet?
Alphabet Inc. es una empresa multinacional estadounidense, creada por Google, compuesta por un conglomerado de empresas, entre ellas, lógicamente, Google. Con ella, Google se convierte en una subsidiaria de propiedad total de Alphabet reemplazando a Google Inc. como la entidad que cotiza en Bolsa y todas las acciones de Google se convierten automáticamente en el mismo número de acciones de Alphabet, con los mismos derechos.
Según Larry Page, su creador y empresario, explica que “Alphabet es mayormente una colección de compañías. La más grande es, por supuesto, Google. Esta nueva Google es una versión más “delgada”; las empresas cuyos productos están más alejados de nuestros principales productos de Internet estarán bajo Alphabet. ¿Qué queremos decir con alejadas? Algunos buenos ejemplos de estas empresas son nuestras incursiones en la industria de la salud: Ciencias (que trabaja en los lentes de contacto que sirven para detectar los niveles de glucosa) y Calico (que se enfoca en la longevidad). En esencia, creemos que esto nos permite más amplitud en la escala de gestión, a medida que administramos sectores que no están muy relacionados de manera independiente.”
Alphabet es el responsable de las siguientes compañías:
– CALICO: (Compañía de investigación y desarrollo (biotecnología) cuya misión es aprovechar las tecnologías avanzadas para aumentar la comprensión de la biología que controla la vida útil.)
– CAPITAL: (Se trata de un fondo de capital de crecimiento respaldado por Google, en el que invierten en personas que sientan pasión por el potencial de la tecnología para cambiar la forma en que vivimos.)
– FIBER: (La dedicación de Google Fiber es ofrecer una velocidad de conexión a Internet de hasta 1 Gibabit por segundo (1000 Mbit/s) tanto para carga y descarga. Supone el acceso 100 veces, aproximadamente, más rápido que lo que la mayoría de los estadounidenses tienen.)
– GOOGLE: (Cómo no, la G del abecedario, reservado para Google. Dentro del mismo seguirán intactos Gmail, Youtube, Apps, Android, Google Maps y claro está, el buscador.)
– LIFE SCIENCE: (Empresa centrada en la investigación e innovación en el área de la medicina. Son los responsables de las lentes de contacto para diabéticos.)
– NEST: (Empresa de domótica que produce termostatos y detectores de humos impulsados por sensores y otros sistemas de seguridad habilitados para Wifi, auto aprendientes y programables.)
– VENTURES: (Se dedica a proporcionar fondos de capital de riesgo para nuevas empresas audaces, ambiciosas en todos los campos, pero con un enfoque hacia la inversión del auto aprendizaje y ciencias de la vida.)
– X LAB (Google X): (Empresa de innovación e investigación “semi secreta” dedicado a hacer grandes avances tecnológicos, como las Google Glass o el Automóvil sin conductor.)
Toda esta estructura se basa en la decisión de independencia de empresas de Google y división de inversiones de capital como lo son Google Ventures, Google Capital, Google X, Calico, Nest o Fiber, los cuales serán administrados por separado de la empresa Google.
Volviendo a las demandas, el Fiscal Weiser indicó que se presentará una moción para consolidar el caso con la demanda presentada a finales de octubre del 2020 por el Departamento de Justicia en coalición con los fiscales generales de 11 estados gobernados por republicanos. En la misma se puso de manifiesto como Google, que controla alrededor del 90% del mercado de búsqueda online a este lado del Atlántico, es la «puerta de entrada indiscutible» a Internet y utiliza prácticas anticompetitivas para mantener y extender su monopolio en este negocio.
EEUU pone el foco sobre los acuerdos a los que llega la compañía para verse beneficiada frente a competidores. El gobierno de EEUU considera que Google utiliza los miles de millones de dólares que ingresa gracias a la publicidad en sus múltiples plataformas para pagar a los fabricantes, operadores y navegadores de teléfonos móviles, como ocurre con Safari, el navegador de Apple, para que utilicen Google como su motor de búsqueda predeterminado, según lo estipula la demanda registrada en un tribunal federal del Distrito de Columbia.
También se hizo alusión a los acuerdos de la compañía en los que la aplicación de búsqueda de Google está preinstalada y no se puede eliminar en los teléfonos móviles que utilizan su popular sistema operativo Android. Además, la fiscalía estadounidense alegó que la empresa prohíbe ilegalmente que los motores de búsqueda de la competencia puedan preinstalarse en los dispositivos que se rigen bajo contratos de reparto de ingresos.
No obstante, el fiscal general de Colorado ha asegurado que su demanda va más allá, dado que examina cómo Google supuestamente utilizó ciertos contratos para asegurar su hegemonía entre otros canales de distribución emergentes que los consumidores utilizan para acceder a los motores de búsqueda, como es el caso de los altavoces inteligentes.
La demanda también alega que Google ha incurrido en una «conducta discriminatoria» en las páginas de resultados de búsqueda que ha limitado la capacidad de los proveedores de búsquedas verticales, como es el caso de Yelp o TripAdvisor.
En Octubre 2020 un grupo de 10 estados republicanos encabezados por Texas presentaron otra demanda antimonopolio contra Google. En la misma se acusa a la compañía de monopolizar el mercado publicitario online y de conspirar junto a Facebook para fijar precios.
La acumulación de acciones judiciales en contra se incrementa cuando Google estuvo nuevamente en el centro de atención antimonopolio de la UE el pasado 22 de junio de 2021, en el momento en que los reguladores abrieron una investigación sobre si su negocio de publicidad digital le da a la unidad Alphabet una ventaja injusta sobre rivales y anunciantes.
La medida del ejecutor de la competencia de la Unión Europea marca un nuevo frente contra Google y sigue más de 8 mil millones de euros ($ 9,5 mil millones) en multas durante la última década por bloquear a los rivales en las compras en línea, los teléfonos inteligentes Android y la publicidad en línea.
La Comisión Europea dijo que investigaría si Google distorsiona la competencia al restringir el acceso de terceros a los datos del usuario con fines publicitarios en sitios web y aplicaciones, mientras reserva dichos datos para su propio uso. También se analizará el plan de Google para eliminar las cookies del navegador y también para dejar de rastrear a los usuarios de Android a través de una herramienta conocida como identificador de publicidad.
Ante estas amenazas, a Google, en casos específicos, le ha tocado que bajar la tecla, y aceptar ciertas condiciones para llegar a un acuerdo. Tal es el caso de Francia, en donde Alphabet ha ofrecido llegar a un arreglo con las autoridades galas en un caso de antimonopolio presentado contra la compañía en ese país, en el que se alega que abusó de su poder en su negocio de anuncios online. El acuerdo incluiría el pago de una multa por parte de Google, que también se comprometería a llevar a cabo cambios operacionales. La Autoridad de Competencia de Francia alega que el servidor de publicidad de la empresa, conocido como DoubleClick for Publishers (DFP) y que es utilizado por la mayoría de las grandes compañías editoriales de internet para vender publicidad, proveyó a la división de anuncios de subastas online, AdX, de ventajas frente a otros operadores de subastas. Las autoridades galas también alegaron otras actividades en las que las herramientas de publicidad de Google se daban un trato preferente entre sí.
Para alcanzar el acuerdo, Google ofreció mejorar las operaciones de AdX con servidores de publicidad que controlen otras compañías externas, así como eliminar otros obstáculos a los que se enfrenta la competencia.
El pacto debe ser aprobado por el consejo directivo de la Autoridad de Competencia de Francia, que podría rechazarlo, pero si sale adelante, podría anunciarse en las próximas semanas.
Otra de las condiciones del acuerdo es que Google no estaría negando ni aceptando su culpabilidad. Además, los cambios que se proponen tendrían carácter vinculante solo en Francia, aunque podrían adoptarse en otras regiones del mundo u otros departamentos de la empresa.